AGENCIAPRESS NOTICIAS. – Según la Asociación Internacional de Ergonomía (IEA), la ergonomía es el conjunto de conocimientos científicos aplicados para que el trabajo, los sistemas, productos y ambientes se adapten a las capacidades y limitaciones físicas y mentales de la persona.
Cabe destacar que dentro de esta disciplina se pueden identificar diversos tipos, siendo uno de los más comunes el físico, que engloba elementos como el uso adecuado de la silla de oficina.
Flor Zuzunaga, docente de la carrera de Terapia Física de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP), explica que “las sillas son un elemento importante e indispensable dentro del trabajo de oficina, ya que se utilizan por largos periodos. Por esa razón deben cumplir con ciertas características para la prevención del desarrollo de problemas posturales”.
Asimismo, la especialista sostiene que “utilizar una silla de oficina adecuada evita problemas que afectan a la columna vertebral y a los miembros superiores e inferiores. De lo contrario, los problemas de salud pueden ir en aumento, generando una alta carga de estrés y afectando la productividad laboral del colaborador”.
Es por ello que es importante tener en cuenta las siguientes características para elegir una silla que sea idónea:
Adaptabilidad. El diseño de la silla debe adaptarse a la forma del cuerpo y a los movimientos del usuario, permitiendo mantener una posición dinámica.
Asiento regulable. Debe ser posible que se regule la altura del asiento y del respaldar para que la zona lumbar pueda tener una posición correcta. Lo ideal es que los pies se apoyen en el suelo sin ejercer una presión excesiva en la parte inferior de los muslos.
Reposabrazos. Este elemento es importante en una silla de oficina, ya que permite que dar apoyo y reposo a los brazos y antebrazos, reduciendo la sensación de cansancio en el área cervical.
Ruedas. Es esencial que el usuario tenga movilidad, por lo que las ruedas son un elemento imprescindible en una silla de oficina. Estas deben contar con cinco ruedas para garantizar la estabilidad.
Material de la silla. El exceso de transpiración puede ser incómodo, por lo que es importante que la silla esté elaborada con materiales transpirables.
Finalmente, la docente de la UTP explica que “para sentarse correctamente en una silla ergonómica se debe seguir la ley de los 90 grados: pies totalmente apoyados en el piso; rodillas y cadera dobladas en ángulo recto, y espalda apoyada en el respaldar”.