Karateca nacional confiesa los malos momentos que vivió por no lograr una presea en los Juegos Olímpicos y su regreso a las competencias internacionales.
AGENCIAPRESS NOTICIAS.- La bicampeona panamericana (Toronto 2015 y Lima 2019), la karateca Alexandra Grande, no detiene su carrera luego de su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y destaca el Programa Vamos con Tokio del Instituto Peruano del Deporte y que el Estado continué apoyando a los deportistas para los futuros eventos deportivos. Ale, también cuenta con el apoyo de la empresa privada que le permite seguir compitiendo en lo que resta del año.
– ¿Cómo te sientes actualmente después de tu paso por Tokio 2020?
Actualmente estoy bien. Sí me hubieras preguntado hace un mes atrás, no lo estaba, por lo difícil que fue asimilar lo que pasó en Tokio 2020. Fue un momento muy difícil y salí por un mes del deporte para el descanso mental. Me había preparado duramente para conseguir una medalla y no pudo darse. Un deportista sueña con una medalla olímpica y yo estaba preparada. Las cosas salieron al revés y sentí como una estocada en el corazón. Estuve algo deprimida, pero es algo que les ocurre incluso a los mejores del mundo.
– Podemos decir que Alexandra ha vuelto…
Ahorita me siento mucho mejor, preparándome para seguir compitiendo porque lo bueno del deporte es que da revanchas. Viajaré a Moscú con el apoyo de mis auspiciadores para participar en un campeonato mundial y seguir sumando en el ranking mundial y clasificar a los Juegos Mundiales del próximo año. Voy a tener más eventos para quitarme la espina y dejar en alto al Perú.
– ¿Sentiste el peso de un país detrás de ti antes de las competencias?
Sí, me presioné mucho y siento que no lo manejé de la mejor manera. Mucha gente puede pensar que Ale tiene años compitiendo que presión puede tener, pero sí. En redes sociales daban por sentado que yo iba a ganar una medalla y sentí mucha presión por eso, pese a que estaba con un psicólogo. Pero ahora me siento fuerte de nuevo y con toda la actitud positiva para seguir compitiendo en los torneos que se vienen. Ha sido muy duro sí, pero ahora me siento fuerte.
– ¿El primer combate en Tokio 2020 fue vital?
En la primera pelea no fui con todo al ataque, sino que guardé precauciones porque se venían más peleas de manera seguida. Imagina que todo ha sido muy rápido y no recuerdo mucho ese momento. A la ucraniana con la que me tocó competir primero (Anita Serogina) ya la había enfrentado cuatro veces y siempre le gané y en Tokio me ganó por primera vez. A todas las chicas en el pull, a las cuatro las había enfrentado antes y les había ganado. Esa vez no se pudo, pero sé que tendré mi revancha.
– ¿Qué piensas acerca de la opinión de la gente sobre los resultados que obtuviste?
He visto muchas críticas por no haber ganado medalla. Dicen que fui de paseo y, en verdad, no le tomo importancia a eso. Esa gente no sabe todo el esfuerzo y sacrificio que hicimos los deportistas para llegar a unos Juegos Olímpicos. Felizmente, también he recibido comentarios positivos de gente que sí sabe lo difícil que ha sido el camino y eso es lo que yo valoro mucho.
– ¿Qué se viene para ti en tu carrera?
Estoy de vuelta en el ruedo. Tengo 31 años y mi organismo está en perfectas condiciones para seguir compitiendo. Muchos dirán Ale esta vieja, pero me han investigado y tengo una edad de 24 años. Se vienen eventos importantes como el Mundial, que será este año, y luego me seguiré preparando para los Juegos Panamericanos de Santiago 2023. Me encantaría ser tricampeona panamericana. Cerrar mi carrera de esa manera, me va a dar pena retirarme. Espero que el apoyo siga igual, que Tokio no haya cerrado las puertas, sino que las abra para apoyar a los deportistas.
– El IPD creó el Programa Vamos con Tokio y ahora pensar en los Panamericanos 2023 y París 2024…
Esperemos que el apoyo siga igual y que el IPD fundamentalmente continúe con estos Programas de Apoyo a los deportistas. Que el estado siga apoyando a los deportistas. Los que estuvieron en Tokio son los mejores, Tokio no acaba. El apoyo no se debe perder. Fuimos 35 en Tokio.